Egea Karate Club, el nuevo dojo del siete veces campeón mundial José Manuel Egea demuestra de nuevo su incansable espíritu ganador y divulgador. Ahora, a través de su nuevo proyecto en Madrid.
El siete veces campeón mundial y trece europeo, José Manuel Egea, abrió hace tres meses un dojo en Villanueva de la Cañada. El histórico karateca español es un incansable deportista que ya ha tocado todos los palos del mundillo. “Paralelo a la competición fui entrenador y empecé con un club a los 21 años”, cuenta a AS el campeón, que siempre ha tenido interés por formarse pero también por formar. “Tampoco era maestro a esa edad”, responde el deportista que pasó de cero a cien en apenas ocho años.
Su recorrido. A los 11 años descubrió la disciplina. “Mis padres nos lo regalaron a mi hermano (Francisco, otro gran karateca) y a mí, y fue el mejor regalo de mi vida”. El joven tenía todas las cualidades para que la Federación Española se interesase por él a los 16 años, y para coronarse campeón de la Copa del Mundo con 19, el más joven en hacerlo. “Fui un privilegiado”, reconoce un Egea que competía frente a rivales que le superaban en edad, pero no en talento. El número uno del ranking mundial durante casi 11 cursos tenía también algo vital: el apoyo de su entorno. “Mis entrenadores me dijeron que tenía las condiciones para ser campeón. Me lo creí y entrené para ello”.
El Daniel Larruso español, que emergió durante el boom cinematográfico del kárate, reúne ahora la experiencia y conocimientos necesarios para convertirse en una especie de Señor Miyagi. A sus 60 primaveras, puede considerarse ya un maestro de nivel que está “contento” por la acogida de su nuevo dojo. Abrió las puertas en febrero con el objetivo de “ser una escuela base en la zona”, algo que implica poder descubrir nuevas promesas, como hizo durante su etapa como seleccionador nacional sub-21. “Me sigue ilusionando”, admite.
El karateca continúa siendo una eminencia. “Fui un referente en modernizar el trabajo a nivel internacional”. Ahora, el método de Egea fusiona lo tradicional con proyectos innovadores como la web para formación online y otros que “todavía no puedo contar”. Lo que no varía del que podría haber sido dos veces campeón olímpico (si el kárate hubiera sido una disciplina oficial en los Juegos) es el ejemplo que da en valores. “Lo que más valoro de estos años son las vivencias”. Y de esta nueva etapa. “Formar buenas personas”.